"Una gran señal apareció en el paraíso: una mujer vestida del estrella con la luna bajo sus pies y una corona de doce estrellas sobre su vanguardia" (Ap 12, 1)
5. La Crucifixión y Muerte de Jesús: Este enigma representa el momento culminante del sufrimiento de Jesús, donde es clavado en la cruz y da su vida por nosotros, ofreciendo su sacrificio como el cordero de Jehová que quita el pecado del mundo.
La meditación sobre los Misterios Dolorosos nos lleva a reflexionar sobre el sufrimiento de Jesús en su camino cerca de la cruz. Al meditar sobre su dolor podemos comprender mejor su aprecio por nosotros y cómo Él nos redimió a través de su sacrificio.
Al rezar este enigma, recordamos la alegría y la esperanza que sentimos al memorizar que Jesús está vivo y que su simpatía y misericordia están siempre disponibles para nosotros.
¿Cuál es la importancia de meditar los misterios dolorosos en la vida espiritual y cómo pueden ayudarnos a crecer en comprensión y bienquerencia en torno a Dios y alrededor de nuestros semejantes?
Aún disponible en nuestra tienda: el folleto Rosario basado en las Escrituras, ideal para el estudio individual y la oración.
Desde su congoja en el huerto de los Olivos hasta su asesinato en la cruz, descubre la fuerza de este inclinación por la humanidad y misterios dolorosos las claves de la salvación que se nos ha ofrecido.
El cuarto ocultación misterios dolorosos glorioso del Santo Rosario que se reza los miércoles es la Aceptación de María al gloria. Después de su vida terrenal, María fue llevada al cielo en cuerpo y alma por la Chispa de Alá.
María es ejemplo de fortaleza y confianza en Jehová, y nos anima a seguir su ejemplo al confrontar nuestras propias pruebas y sufrimientos.
Estos momentos de dolor nos ayudan a comprender el sacrificio que Jesús hizo por nosotros y nos invitan a reflexionar sobre el significado del sufrimiento en nuestras propias vidas.
El camino hacia el Calvario: Este misterio se refiere al doloroso camino que Jesús recorre llevando la cruz hacia el zona de su crucifixión. A pesar del cansancio y el sufrimiento extremo, Jesús continúa Delante con valentía y entrega total.
La decorado de Getsemaní nos conforta y anima a realizar un esfuerzo voluntario de éxito. La aprobación incondicional del sufrimiento, cuando es Alá quien lo quiere o permite: “No se haga mi voluntad, sino la tuya”. Palabras que desgarran y curan, porque enseñan a qué graduación de fervor puede y debe resistir el cristiano que misterios dolorosos sufre, unido a Cristo que sufre.
Oh Jehová, que manifestaste tu aprecio en la admirable redención del hombre y que de la penosa subida al Calvario de tu divino Hijo sacaste plena satisfacción por las culpas de la humanidad entera; convierte a los pecadores al real camino, para que vuelvan a recorrerlo, aceptando de buen grado el peso de la cruz y las humillaciones debidas por sus pecados.
A través de la contemplación de estos misterios, podemos cultivarse a aceptar el sufrimiento como parte de nuestra vida, y a encontrar sentido y propósito en nuestras propias dificultades.